A la siesta todos duermen, menos yo que vago de un cuarto a otro. Tengo 6 o 7 años. Miro revistas viejas. Revuelvo cajones. Abro el bargueño. Todavía tiene olor a pan de Navidad y algunas piezas rotas del último pesebre. El cristalero es el tesoro de mi abuela. Faltan algunas de sus más preciadas tazas de porcelana porque un gato saltó adentro peleando con su propia imagen reflejada. En una pequeña biblioteca está la “Enciclopedia de
Lo que queda cuando se van a dormir los nenes, cuando termina la jornada, cuando nadie espera una respuesta, cuando Marcelo navega o hace música o pinta, cuando lo miro pintar, cuando abro el laptop para escribir, cuando leo y releo lo que escribí cuando me sentía muy bien, muy mal o muy ialei. My place, my time, my moment, my dear ialei state of mind.
sábado, 28 de julio de 2007
A la siesta
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2 comentarios:
hERMOSO, MARIANA.
Ralma.
pinti,es uno de los mejores retratos que he leido.Si bien no podia conocer tus emociones,recuerdo muy bien los objetos y los aromas que mencionas.Caramba;cuanto te quiero!!! mincha
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