miércoles, 25 de abril de 2007

esa tristeza

esa tristeza…

que resbala

que cae sobre nuestra mesa

esa tristeza…

que funde tu belleza

de saber decir

de fabricar poesía con jirones

que tu alma complacida deshilacha

y teje tu velo

y teje tu mortaja

y teje la capa que cubre nuestro frío

3 comentarios:

Saludos, Terrícolas dijo...

Qué curioso no, esa tristeza que a veces nos paraliza y a veces es la última ventana. Hay gente que no lo entiende.

Ah, el otro día hice lío con tu mail. Pasame una dirección de correo y te cuento por línea privada.

Unknown dijo...

Mamá decia siempre:a veces siento una tristez tan profunda que me ahoga.Segun ella no tenía motivos.Pero me pregunto:que es lo que nos trae esa senscion tan poderosa que nos sume en una nube donde se derriten nuestros sueños.o
maestra,te saludo!!!

Marcelo Escobal dijo...

Podría postear alguna cosa sobre neurobiología de la depresión, pero arruinaría las cosas.
Los docentes más viejos insistían mucho en diferenciar la tristeza (un estado anímico normal) de la depresión (un estado patológico). Diferenciar éstos estados no siempre es fácil. Quizás hay un problema de falta de lenguaje más técnico para describir estados de ánimo que se describen mejor por la poesía. No sé.
Un paciente (escritor él) diferenciaba dos tristezas: una humana (cuando estaba "bien") y una "tristeza animal" que identificaba con depresión. Interesante.