A pasitos torpes
de piecitos gorditos camina
hacia la puerta abierta.
Afuera llueve.
Estira la mano
y estalla una gota sobre su palma.
Prueba.
Se pregunta por qué cae del cielo
tanto sabor a nada.
Una de las cosas que nos decepciona es la necesidad de darle sentido a las cosas, más allá de lo evidente. Sometimes a rose is a rose, is a rose, is a rose.
Por otro lado, la toperza nos pinta tan de cuerpo entero como la curiosidad.
Las puertas abiertas y la lluvia perpetua sobre nuestros refugios nos desafían. Bueno, por lo menos ya caminamos.
1 comentario:
Cuanto nihilismo, corazón.
Es de tus facetas más oscuras.
Más allá de lo negruzca que es usted.
ME
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